La Eucaristía fue oficiada ante el Altar del Jubileo, en la Santa Iglesia Catedral Metropolitana de Sevilla
El pasado sábado, 18 de septiembre, tuvo lugar la Eucaristía para celebrar la ordenación de varios diáconos en la Iglesia de Sevilla y de un sacerdote, natural de La Puebla de Cazalla. Uno de esos nombramientos diaconales fue el de Aniceto Vadillo, ursaonense y hermano de la Hermandad de Jesús Caído.
Según cuenta la página web oficial de la citada Hermandad: «Bajo las impresionantes bóvedas góticas, a los sones del órgano interpretado por el maestro don Carlos Navascués; las intervenciones del coro de la catedral, dirigido por don Herminio González Barrionuevo, y el aforo permitido al completo, la Eucaristía de ordenación comenzó a las once de la mañana. Entre otros, concelebró el anterior arzobispo de Sevilla, monseñor Juan José Asenjo Pelegrina.
A la Eucaristía asistieron el vicario general, don Teodoro León; el secretario general de la Archidiócesis de Sevilla, don Isacio Siguero; miembros del Consejo Episcopal, del Cabildo, el rector y los formadores del Seminario Metropolitano, presbíteros, diáconos, seminaristas, miembros de la vida consagrada, familiares y amigos de los ordenandos.»
Presencia de la Parroquia de la Asunción y del pueblo de Osuna
La Parroquia de la Asunción de Osuna y su feligresía, así como el pueblo también estuvieron presente en la figuras del «titular de nuestra parroquia de la Asunción, vicario de la Zona Sur de la Archidiócesis de Sevilla y director espiritual de nuestra Hermandad, don Manuel Ávalos Fernández, y el anterior titular, don Antonio Jesús Rodríguez Báez, quien ahora dirige el Instituto de Teología a distancia del Obispado de Cádiz-Ceuta. También, monseñor Mariano Pizarro Luengo, capellán de honor del papa Francisco, párroco emérito de la Victoria y adscrito a la parroquia de la Asunción.», tal y como informa la citada web.
Aniceto, tras este nombramiento, le ha sido designada la Parroquia de Santa María Magdalena, de la capital hispalense.
Desde este medio cofrade damos la enhorabuena a nuestro amigo y hermano Aniceto, orando por él y por su vocación sacerdotal.