El pasado 28 de Febrero se desmontaba el retablo de la Inmaculada Concepción y tras él apareció otro
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La Iglesia Parroquial del Señor San Sebastián emprendió la restauración del primero elaborado en madera gracias a la Subvención de Bienes Muebles Religiosos ha podido desempeñarse.
En el momento del desmontaje apareció un retablo sobre el muro, el cuál cobijaba a la imagen de Jesús Nazareno hasta que cambió su nueva ubicación.
Este retablo fechable entre el S XVII-XVIII presenta tres calles, la central lo remata un frontón partido de estética renacentista el cuál enmarca el cordero místico y sobre él se sitúa el anagrama “JHS”. Está franqueado dos pináculos y con ornamentación vegetal com una alusión al trigo y el vino aunque también animal ya que presenta aves.
En las calles laterales se sitúan dos grisallas del S XVIII las cuáles cobijan a San Miguel Arcángel matando al Demonio a la izquierda y a San Rafael Arcángel sosteniendo el pez que parece basado en la iconografía cordobesa de este santo.
Este retablo se enmarca en dos columnas salomónicas y ornamentación a base de hojarasca.
El restaurador Juan Alberto Filter Peinado y la parroquia afirman que no tiene suficiente valor para ser restaurado, el cuál es más que patente viendo la calidad de sus grisallas.
El pueblo de Pedrera no se puede permitir volver a tapiar parte de la parroquia y la propia historia del pueblo.
Al fin y al cabo el ser humano es quien da valor e interpreta el arte y este retablo tiene calidad más que demostrada para ser restaurado y emplazar el superpuesto en otra ubicación ya que la parroquia tiene ubicaciones más que suficientes para emplazarlo.
Francisco Jesús Aranda Humanes